Aprovechando su estadía en Argentina, el "Muñeco" Gallardo habló con el diario deportivo Olé sobre su presente en Nacional y el descenso de River.
Según confesó, vivió el partido por el repechaje ante Belgrano de Córdoba con mucha intensidad y tras conocerse el desenlace lloró junto a sus hijos.
"Lo vi en casa, en Buenos Aires, pero no quise ir a la cancha. Y lo viví con la intensidad que el partido merecía, con la adrenalina de no saber qué podía pasar. Mi hijo sufrió más de la cuenta y yo me reflejé en él. Cuando mis hijos lloran, lloro con ellos. Ver al más grande sufrir como lo hizo, fue muy duro", confesó el "Muñeco", que dijo que le cuesta desligarse a River, el club que lo vio nacer y crecer como jugador.
"Yo nunca me pude despegar de River. Me identifico demasiado con el club y la gente me lo hace sentir también. Siempre me costó desligarme. Por algo los jugadores quieren volver: saben que River te da la posibilidad de ir tras la gloria. Más allá de todo, en la A o en la B, en River jugás por la gloria", explicó.
Sobre el cierre de su carrera, que no se dio en el "millonario" tal como esperaba, dijo que por algo habrá sido que las cosas se dieron así.
"Eso no cambia todo lo que viví en River, todos los buenos recuerdos del club que tengo en mi corazón. Uno por ahí sueña con un cierre dorado, pero yo me tomo las cosas como vienen. Si las cosas se dieron así, fueron por algo. Nada tapará todo lo lindo que viví", comentó.
Consultado sobre su futuro como entrenador, y el sueño de dirigir al equipo argentino, dijo que espera que en algún momento se de.
"No sé qué puede pasar el día de mañana. Pero me identifico demasiado con River. Algún día me gustaría, no te voy a mentir, sería espectacular, pero no quiero adelantarme a nada. Es muy posible que algún día, en un futuro, me encuentre ligado a River. Me siento parte", señaló.