Los de Capello estarán en octavos como segundos de grupo · Eslovenia estuvo toda la tarde clasificada... hasta que Estados Unidos marcó en el 91' y dejó a los de Kek a un paso de hacer historia
Inglaterra resurgió justo a tiempo. Los ingleses se miraron el escudo y sus tres leones rugieron en el Mundial en el tercer partido. El ejército de Capello cumplió con su misión de estar en octavos de final gracias a un solitario tanto de Defoe, pero lo hará como segundo de grupo por culpa de Donovan, futbolista de Estados Unidos que se presentará en las pesadillas del fútbol esloveno por los siglos de los siglos.
Si Inglaterra perdió el billete de primera clase en el último suspiro, Eslovenia se quedó sin sitio en el avión cuando ya había hecho las maletas. Perdían los eslovenos, pero el empate en el otro partido del grupo les hacía un favor. Segundos antes de escuchar el pitido final, marcaron los 'yankees' y todo se acabó para los de Kek, que tocaron con los dedos de las manos hacer historia y entrar en octavos de final.
Los 'pross' ganaron por el peso de su escudo. Inglaterra, esta vez sí, fue Inglaterra. Hasta este miércoles nadie sabía que los ingleses se habían presentado en el Mundial de Sudáfrica. Los futbolistas que le piden a Dios que salve a la Reina son así. En Port Elisabeth, se acordaron de ser ellos mismos y de entender el fútbol tal y como lo inventaron. La camiseta roja de los ingleses acabó mojada de litros de sudor.
Milner y Defoe, determinantes
Inglaterra empujó, apretó y ganó la batalla frente a un equipo esloveno frío y anodino, que tuvo su opción hasta el final por el perdón inglés. Los 'pross' no finiquitaron el partido y acabaron temblando dentro del área, con el pánico en el cuerpo. El león inglés se había quedado sin fuerzas.
Capello movió fichas y volvió a salir triunfante de una final, partidos que el italiano entiende como pocos. Upson (Carragher estaba sancionado), Milner y Defoe fueron las novedades. Los tres fueron determinantes y le dieron la razón a Fabio. Entre los dos últimos se explicó el único gol del partido. Milner entendió como nadie que Inglaterra es Inglaterra. En banda derecha, centró al corazón del área sin pensárselo y remató Defoe, que fue con todo y se aprovechó del despiste de Suler. Handanovic, notable guardameta, no pudo sacar el disparo. El delantero 'spur' dejó su selló y nadie se acordó de Heskey, delantero del gusto de Capello y de pocos más.
El rey de la selva y el miedo
El tanto de Defoe fue un toque de corneta para Inglaterra. Del escudo inglés salieron tres leones y se prepararon para devorar a los eslovenos. Rugieron, pero no hincaron el diente. Perdonó Rooney, felino que no ve portería en Sudáfrica, y Handanovic domó al rey de la selva con los guantes. Sacó un cabezazo de Terry y tocó con los dedos un zarpazo de Rooney que escupió el palo. Inglaterra amagó, pero no remató a Eslovenia.
Los últimos minutos en Port Elisabeth tuvieron más emoción y tensión que una sala con estudiantes esperando la nota de selectividad. Un gol cambiaba el mundo. Ese tanto lo hizo Estados Unidos para borrar el sueño de Eslovenia, que se hubiese colado en los octavos. Inglaterra aguantó el tipo hasta con la bandera. Todo acabó y los ingleses lo celebraron como si les fuese la vida en ello, que les iba. Ha vuelto Inglaterra.
Marca.com